Riad Hotel Belleville Marrakech 3*
Servicios principales
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Wi-Fi gratis
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Servicios 24 horas
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Agradable para niños
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Desayuno
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Aire acondicionado
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No se permiten mascotas
Ubicación
El Riad Hotel Belleville Marrakech Marrakesh se encuentra a 10 minutos a pie de la Madraza de Ben Youssef y cuenta con cajero automático y servicio de cambio de divisas. Este hotel ofrece alojamiento con WiFi en toda la propiedad.
El hotel está en el barrio Medina, a una distancia cercana de la Plaza de Yamaa el Fna. Un destino popular en Marrakesh es la Casa de la fotografía, que está aproximadamente a 16 minutos a pie del hotel. El alojamiento está situado alrededor de 15 minutos a pie del Museo de las Artes Marroquíes, mientras que la estación de autobuses Grand Taxi se encuentra a menos de 5 minutos a pie del sitio. El Riad Hotel Belleville Marrakech está a 10 minutos en coche del Aeropuerto Marrakech Menara, que está situado a 10 km.
El Riad Hotel Belleville Marrakech Marrakesh cuenta con las habitaciones para alérgicos equipadas con servicio de planchado y climatizador, así como con TV de pantalla plana con canales vía satélite. Los huéspedes pueden usar bidé, inodoro y ducha, además de secadores de pelo y toallas de baño. Las habitaciones de este hotel disponen de almohadas de plumas, almohadas de plumón y almohadas de plumón/pluma.
El Riad Hotel Belleville Marrakech sirve a diario un desayuno continental. El restaurante Almasraf cafe prepara comida marroquí y se encuentra a un corto paseo del lugar.
Reseña de un crítico de hotel
Al llegar al Riad Hotel Belleville Marrakech, me recibieron con una calidez que inmediatamente me hizo sentir como en casa. La ubicación es inmejorable, a solo dos minutos caminando de la vibrante plaza Jemaa El Fna, lo que facilita explorar la medina sin perderse entre sus laberintos. Desayunar en su acogedor patio, disfrutando de una selección de deliciosa gastronomía marroquí, fue un verdadero placer que realmente resonó con mi amor por la buena comida. El servicio fue otro de los puntos fuertes. Abderrasis, el dueño, y su equipo, especialmente la mujer que nos servía en el desayuno, fueron encantadores y atentos, siempre dispuestos a ayudarte. Por todo esto, no dudaría en regresar a este rincón especial en Marrakech, donde la combinación de hospitalidad y autenticidad marroquí me dejó maravillado y con ganas de más.